28 de enero de 2010

Pensar no mata.

Pensar no mata, eso es fácil de deducir, pero duele. Sobre todo cuando por la cabeza se suceden un montón de pensamientos, de palabras, frases no dichas a tiempo ni a destiempo, ideas que se mueren en uno, por que nuestro interlocutor ya no las podrá oír jamás, palabras solo para esa persona que ahora, circulan por la red neuronal perdidas, vagando, golpeándose de tanto en tanto con la razón y obligándonos a recordar que eso sigue aún ahí, dando vueltas eternamente, esperando un remedio que las alivie, pero que saben, que no van a adquirir.
Puede existir un atisbo de calma en la confidencia del pensar entre amigos, pero...
Lo único que calma tanto pesar, es saber, que al final, todo acabará el mismo día que nosotros... hasta entonces solo queda armarse de paciencia y saber esperar---

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Escribe tu comentario aquí, gracias.